Blanca Nieves Palacios Barreda
LAS DOS X
Blanca Nieves Palacios Barreda
El titulo del presente artículo, pareciera el nombre de alguna cerveza, pero no, se trata del nombre de dos personas, una mujer y un hombre que, unidos políticamente hablando y en la coincidencia de sus ambiciosos intereses, aderezados de corrupción, engaños y mentiras han sobre salido en la política, Xóchitl Gálvez, del Partido de Acción Nacional (PAN) y Claudio X. Gonzales Guajardo del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
La primera que ostenta en su nombre la X, presume ser indígena por cuestiones puramente de interés personal, para alcanzar un status con el que se ha venido beneficiando durante muchos años.
El otro, cuya X es un enigma, se dice que es, Xicótencatl, pero como nada tiene que ver con los indígenas, afirma que, esa X se refiere a su real nombre Xavier, resumiendo, su nombre sería pues: Claudio Xavier Gonzáles Guajardo.
Claudio Xavier (con X no con J), es hijo de un prominente empresario, por añadidura millonario y miembro de ese grupo que ha chupado la sangre a los mexicanos por décadas; su mayor empresa; Kimberly Clark de México, que produce el papel sanitario, los kleenex, toallas sanitarias, servilletas de mesa, de cocina y todos esos productos tan indispensables que no faltan en los hogares, su nombre, Claudio Gonzáles Laporte.
Siendo Claudio X. un fiel alumno de Carlos Salinas de Gortari, obviamente su más acérrimo enemigo es hoy por hoy, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), actual Presidente de la República de México, a quien desde el primer día de su mandato le hicieron saber que, él nunca debería de haber llegado a ocupar la presidencia de México.
Sobre todo, cuando AMLO, a través de la secretaria de Hacienda y Crédito Público exhibió y exigió el pago de los millonarios adeudos en impuestos, de los millonarios (valga la redundancia) empresarios, que, habiendo sido favorecidos por los gobiernos priistas y panistas, se negaban a cubrir sus deudas.
Al inicio de su mandato todo parecía caminar sobre alfombra de algodón con los empresarios, al no estar de acuerdo con la política de bienestar a través de programas sociales, se rompió lo que se había llamado, “la luna de miel” con ese poderoso sector.
Y salta a la palestra como el gran luchador social, Carlos X Gonzáles Guajardo, cuya adicción a las actividades de filantropía que, le venía redituando millonarias cantidades de dinero, de la cuales por supuesto a nadie daba cuenta.
Esto es algo que, lo identificó en gran medida con Xóchitl Gálvez, quien durante mucho tiempo ocultó su millonario patrimonio a través de sus empresas, valiéndose de su posición como funcionaria en los gobiernos, tanto de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, obteniendo hasta con éste mismo gobierno morenista, jugosos contratos para sus empresas.
Y la guerra política contra AMLO se manifestó mediante publicidad en todos los medios informativos a su alcance; en plantones en el Zócalo; marchas en defensa del Instituto Nacional Electoral (INE), cuya corrupción se desbordaba no solo por los desorbitantes salarios y exageradas prestaciones de muchos de sus consejeros, con Lorenzo Córdoba a la cabeza, sino por los fraudes hechos con gran cinismo y desvergüenza en los procesos electorales.
En estos últimos meses la parafernalia armada por AMLO con el adelantado tiempo de las campañas electorales para el 2024 y el señalamiento de sus candidatos, la alianza hecha por el PAN, PRI y al Partido de la Revolución Democrática (PRD), denominada, “Va por
México”, organizada y manipulada por los hombres del poder económico a través de Claudio X, igualmente dio inicio, haciendo toda una faramalla en la elección de sus candidatos, que, haciendo una masa de todos ellos, aproximadamente 30 aspirantes, no sacamos uno bien hecho, pero la cúpula donde se decide quien será la contrincante del o la candidata de MORENA, le echo el ojo y dio su aprobación, favoreciendo a Xóchilt Gálvez seguramente por la vulgaridad como se expresa y su inmoral comportamiento como Senador; sí, justamente a esa senadora que se tira en el piso del congreso y se luce entrepiernada con dos de sus homólogos.
No cabe duda que esa alianza “va por México”, formada por puros personajes de lo peor, corruptos, vividores ancestrales de la política mexicana, que buscan nuevamente la silla presidencial, anda más perdidos que un jockoque, si los efectos de sus malos gobiernos aún nos duelen y afectan a los mexicanos y, siguen sin respetar al pueblo ni nuestras instituciones.